jueves, 25 de abril de 2013

Como convertirnos en anormales sin notarlo

Hoy en el cine, antes de ver la película, he tenido que engullir forzosamente una batería de spots publicitarios que evidencian la crisis aguda por la que pasa el cine y sus salas.
A pesar de intentar evadirme de la publicidad me ha resultado imposible tras toparme con este anuncio. Primero verlo y luego hablamos:

Lo realmente grave de este anuncio es que la inmensa mayoría de los que lo habéis visto no habréis apreciado nada negativo, incluso, me atrevo a decir que veréis en el spot una oferta de ventajas innumerable. Pues bies, este es el macabro trabajo que hace la publicidad  y sus empresas con nuestra sociedad débil y maltrecha. En este caso tan llamativo, se nos muestra a un padre absolutamente anormal, un padre que no sabe nada de nada y encima sonríe feliz de su ignorancia y ante la incapacidad total de responder una sola pregunta a su hija. Pero más vale que tiene una dependencia obsesiva a un aparato que le chiva todo lo que él no sabe, entendemos que por lo menos leer sí que sabe, lo que desconocemos es su fluidez. De este modo, el anuncio en cuestión es claro en el mensaje y no lo esconde: "no importa que seas tan tonto de remate como para no contestar ni una pregunta a tu hija, con este nuevo móvil con un sistema para tontos podrás evadir tu ignorancia y navegar en ella feliz".
Parece que este será nuestro futuro y el de nuestros hijos, ser dependientes de una tecnología tan fugaz que hace imposible la retentiva y el desarrollo cultural. Esperemos que este padre imbécil no pierda nunca su móvil, de lo contrario verá cómo su ignorancia lo engulle como me ha engullido a mi esta publicidad.
Mientras que yo seguiré enriqueciéndome con la sabiduría que me han transmitido mis padres, abuelos y gente en general de forma oral aprehendida y memorizada, otros, lamentablemente, reducirán su libertad y capacidad de retentiva para darle autoridad a un aparato que, lejos de hacerte inteligente, te convierte en rematadamente imbécil. La elección es tuya.

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